(Zaragoza, martes, 14 de diciembre de 2021). La Universidad de Zaragoza se sitúa en el 5º lugar de las universidades españolas en equipamiento científico-técnico, tras obtener 7,6M€ de la Agencia Estatal de Investigación para 8 Infraestructuras de Investigación y Equipamiento Científico-Técnico, que permitirán aplicaciones punteras en el ámbito de la medicina, la ingeniería, las nanotecnologías o la energía, entre otras disciplinas, y cuyo uso redundará en un alto impacto social y económico.
Contribuirán, por ejemplo, al desarrollo de fármacos más eficaces, de tecnologías cuánticas de la información, la identificación de elementos tóxicos en materiales o la fabricación de microchips con una velocidad y resolución no alcanzadas previamente.
La financiación de esta convocatoria está incluida en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en el marco de los fondos Next Generation EU, y permitirá a la Universidad de Zaragoza poner en marcha cuatro equipos de alto nivel científico en el Servicio General de Apoyo a la Investigación (SAI); dos, en el Instituto Universitario de Investigación de Ingeniería en Aragón (I3A); uno en el Instituto Universitario de Investigación de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI) y otro en el Laboratorio de Microscopías Avanzadas (LMA) – Instituto de Nanociencia y Materiales de Aragón (INMA), centro mixto CSIC-UNIZAR.
La Universidad de Zaragoza ha conseguido 8 de las 25 solicitudes presentadas por un importe total de 7,6M€, frente a las 217 concedidas a nivel nacional de las 717 recibidas, con una cuantía máxima de 180M€.
De este modo, el campus público aragonés pasa a ocupar el 5º lugar tanto en número de solicitudes aprobadas (por detrás de las Universidades de Barcelona (UB), Politécnica de Madrid (UPM), Autónoma de Madrid (UAM) y de Castilla-La Mancha (UCM) como en el importe financiado (por detrás de UB, UPM, UAM y Universidad de Santiago de Compostela).
La finalidad de la convocatoria es proveer de equipamiento científico-técnico a los servicios comunes de investigación dotándolos de equipos de última generación, altamente especializado o complejo, que permitan una investigación multidisciplinar y de excelencia y el desarrollo de actividades de I+D altamente competitivas.
“Nuestra Universidad de Zaragoza vuelve a demostrar su capacidad y solidez científica, tras captar financiación nacional con propuestas que se caracterizan por su alta calidad, singularidad, innovación, prestaciones, objetivos y su contribución a la investigación de frontera”, han subrayado la vicerrectora de Política Científica, Rosa Bolea, y la vicegerente de Investigación, Carmen Baras, en la presentación de estos resultados en rueda de prensa.
Ambas responsables han coincidido a la hora de felicitar públicamente a los investigadores principales y a sus equipos de trabajo, que han demostrado que “sus proyectos superan con creces los criterios de evaluación de esta convocatoria, como el de la calidad y viabilidad de la propuesta, la calidad y solidez del equipo de investigación y el impacto científico-técnico y el impacto social y económico”.
Al acto han asistido los investigadores principales de los equipos adjudicados y directivos del SAI: Blanca Bauluz, Ana Belén Arauzo, Juanjo Aguilar, junto al director Javier Sesé; del BIFI: Adrián Velázquez y el director Yamir Moreno; del I3A: Jesús Arauzo y Estefanía Peña, junto al director Pablo Laguna; y por parte del LMA-INMA, José María de Teresa, acompañado por Pilar Cea y Conrado Rillo, como directores del LMA y del INMA, respectivamente.
En el proceso de selección interna de las solicitudes, desde el Vicerrectorado de Política Científica se mantuvieron reuniones tanto con la dirección de los Institutos Universitarios de Investigación como del SAI, con objeto de realizar peticiones que cumplieran con todos los requisitos de la convocatoria, en especial los relativos a servicios comunes, accesos y personal, evitando asimismo duplicidades en las peticiones y fomentando alianzas.
Se adjuntan imágenes de la rueda de prensa. En la foto de grupo, la vicerrectora de Política Científica, Rosa Bolea, y la vicegerente de Investigación, Carmen Baras, con el resto de investigadores y directores de centros que han logrado esta financiación.
La presentación de estos resultados está disponible en: https://youtu.be/YVS7RwqBFW8
INFRAESTRUCTURAS CONCEDIDAS
SERVICIO GENERAL DE APOYO A LA INVESTIGACIÓN (SAI)- 4 EQUIPOS
1-Microsonda Electrónica con fuente de Emisión de Campo con 4 WDS y espectrómetro para estados de oxidación en metales de transición. (1,499.228,52€)
Blanca Bauluz, Catedrática de Cristalografía y Mineralogía. Dpto de Ciencias de la Tierra. Investigadora del Instituto Universitario de investigación en Ciencias Ambientales de Aragón (IUCA)
La resolución espacial y la capacidad analítica de la microsonda electrónica que se va a adquirir permitirá el desarrollo de análisis químicos cuantitativos a escala submicrométrica en muestras sólidas. Esto permitirá, por ejemplo, la identificación de elementos con interés económico o la de elementos potencialmente tóxicos en diversos materiales. Además, la incorporación de un espectrómetro que diferencia estados de oxidación en metales supone un avance tecnológico muy importante, novedoso y de gran interés en la investigación en Geología, Materiales y Patrimonio, que hará que el SAI sea un laboratorio de referencia a nivel nacional y la investigación de sus usuarios avanzará, siendo una investigación de frontera.
2-Plataforma Sub-K Medida Físicas Cryofree (943.820 €)
Ana Belén Arauzo: Responsable del Servicio de Medidas Físicas del SAI.
Se han concedido 943.820€ para la adquisición de un equipamiento multi-opcional que permite caracterizar las propiedades magnéticas, térmicas, eléctricas de materiales en un amplio rango de temperaturas y altos campos magnéticos (hasta 200.000 veces el campo magnético terrestre). Esta infraestructura permitirá aportaciones en la mejora de la sostenibilidad energética y el desarrollo de tecnologías cuánticas de la información.
Lo más singular de este equipamiento es que extiende la temperatura de medida al rango del sub-K, es decir por debajo de 1K de temperatura, que equivale a -272 ºC, cercano al cero absoluto (dos grados más frío que en el espacio exterior). De esta manera, todos los procesos térmicos se paralizan y se alcanza a observar nuevos fenómenos físicos. Tiene aplicaciones y permitirá, entre otros, el estudio de los materiales usados en ordenadores y tecnologías cuánticas. Cuenta además con aplicaciones en la industria aeroespacial, en instrumentación científica y en grandes instalaciones científicas como el Laboratorio Europeo de Física de Partículas, CERN, o el ITER (proyecto internacional de reactor de fusión).
3-Magnetómetro SQUID Sub-K (853.720 €)
Ana Belén Arauzo: Responsable del Servicio de Medidas Físicas del SAI.
Se han concedido 853.720 € para la adquisición de un magnetómetro de última generación, instrumento científico que mide el magnetismo de materiales en función de la temperatura y el campo magnético, dotado de un sensor superconductor de interferencia cuántica (SQUID) de altísima sensibilidad, y con extensión al rango de muy bajas temperaturas, el sub-K. Con él se podrán potenciar desarrollos asociados a tecnologías cuánticas, sensores criogénicos, espintrónica, imanes moleculares y nuevos fenómenos físicos de origen magnético.
Este equipo tiene la peculiaridad de una alta sensibilidad y de permitir un control dinámico del campo magnético que es fundamental en el estudio de fenómenos dinámicos magnéticos en la nanoescala. Esta característica permitirá avanzar en el desarrollo de nuevos materiales para las TIC, para aplicaciones energéticas, como son los refrigeradores magnéticos moleculares, nuevos materiales magnéticos multifuncionales, estudio de imanes usados en motores, nueva generación de cables superconductores, además de investigación en aplicaciones biomédicas como son los materiales para hipertermia magnética usados en el tratamiento del cáncer.
4–Máquina de Fabricación Aditiva de componentes metálicos y equipo de Tomografía Computarizada por rayos X para aplicaciones industriales (1.122.214 €).
Juanjo Aguilar. Catedrático de Universidad – Ingeniería de Fabricación- I3A
Se han obtenido 1.122.214 € para adquirir un equipo de medición por Tomografía Computarizada (TC) y un equipo de Fabricación Aditiva metálica que emplea la tecnología de Fusión en Lecho de Polvo, concretamente, un equipo de Fusión Selectiva por Láser (SLM). Se trata de dos equipos singulares de altas prestaciones, con aplicaciones en numerosos campos, y complementarios entre sí, dado que las piezas obtenidas por fabricación aditiva mediante esta tecnología presentan una alta complejidad geométrica interna, por lo que la técnica de TC permitiría la evaluación interna de la calidad de las piezas mediante una tecnología no destructiva totalmente innovadora y con una tecnología de vanguardia.
Ambos equipos pueden contribuir a la investigación de frontera, gracias a su complementariedad y a su versatilidad, lo que los dota de un importante potencial de aplicación a diferentes disciplinas, como puede ser el ámbito de la medicina, la ingeniería, las nanotecnologías o la energía.
A estos equipos concedidos al SAI, se suma el equipamiento concedido al Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI), que consta de una Plataforma de mezcla rápida con flujo detenido y detección espectroscópica para la caracterización de estabilidad, interacción y reacciones en procesos biológicos dependientes de proteínas (585.000 €), los dos equipos concedidos al Instituto de Ingeniería en Aragón (I3A): Caracterización físico-química de residuos como materias primas de 2ª generación (737.249,33) y un Microscopio confocal con sistema de alto rendimiento basado en hoja de luz (Light Sheet) y sistema para la evaluación de la toxicidad (1.375.000€) y, por último, el equipo de Microscopía correlativa AFM-SEM, crio-microscopía y crio-fabricación, litografía electrónica y de iones de alta velocidad (487.434€) concedido al Laboratorio de Microscopías Avanzadas (LMA)- INMA.